Nota de prensa: Hoy día 28 de febrero en el Teatro Arriaga de Bilbao están reunidas muchas autoridades de Bizkaia, Gipuzkoa y Araba, con los tres diputados generales y el Lehendakari a la cabeza, para celebrar el 140 aniversario del concierto económico.
Pues bien, desde aquí queremos recordarles que dicho concierto económico solo tiene interés para la ciudadanía si sirve para asegurar una vida digna para todas y todos. Las personas y su bienestar deben de estar en el centro de las políticas públicas.
Nos encontramos en un momento crucial, sobre todo, para las personas que perciben la Renta de Garantía de Ingresos (RGI) y la Prestación Complementaria de Vivienda (PCV). En breve se va a empezar a discutir en el Parlamento Vasco un cambio de la Ley de la RGI de 2008, que va a empeorar, si no lo evitamos, lo hoy existente.
Ya con la ley actual y según la “Encuesta de Pobreza y Desigualdades Sociales (EPDS) 2016” del Gobierno Vasco hay 60.000 personas que, estando en situación de pobreza, no perciben la RGI; y otras 63.000 personas que, percibiéndola siguen siendo pobres.
El objetivo de la propuesta de reforma de la RGI debería ser dar la vuelta a esta situación: lograr que nadie que sea pobre se quede sin acceder a la RGI o que nadie que acceda a ella siga siendo pobre.
Pues bien la conclusión es clara si no frenamos la voluntad del PNV y PSE de empeorar la ley actual solo queda esperar un aumento importante de la pobreza.
La RGI no es solo un derecho de las personas que sufren la pobreza sino de toda la ciudadanía. Lo mismo que la sanidad no es un derecho solo de las personas enfermas, el derecho a una renta mínima digna que acabe con la pobreza es un derecho de toda la ciudadanía, derecho que hoy nos toca reivindicar y defender. En opinión de ARGILAN-ESK, en un país rico como es Euskadi, no podemos permitirnos que sigan existiendo personas empobrecidas. Necesitamos una RGI que acabe con la pobreza y no podemos aceptar ni un recorte más.
Salgamos a las calles y exijamos UNA RGI QUE ACABE CON LA POBREZA y que no se realice ni un recorte más a nuestros derechos.