La huelga en Novaltia Bizkaia fue convocada el pasado 22 de julio y está siendo secundada por 20 trabajadores de los 48 que hay en la empresa. Está teniendo un gran impacto en la producción, donde 18 de 24 trabajadores pertenecen a esa sección.
Según los representantes del Comité de Empresa (ELA) nunca ha existido negociación ya que la empresa no se ha movido ni un ápice de su primera oferta realizada el día 19 de julio del 2019. De hecho, aseguran que no se han realizado más reuniones desde el mes de noviembre del 2019, donde en la última reunión tras ceder y llevar el Comité una rebaja del 25% y cesar las actividades relacionadas con la huelga a petición de la empresa durante 2 semanas, fue respondida con la misma oferta de siempre pero empeorada.
Denuncian que «la situación es de bloqueo total ya que hay una parte que no quiere negociar ni ceder en NADA».
Motivos de la huelga:
– La falta de acuerdo durante 2 años en la negociación de un nuevo convenio colectivo. (El convenio vigente expiraba el 31 de diciembre del 2017 pero tenía una cláusula de ultractividad y por ello aún se regían por el).
– La ruptura unilateral de las negociaciones por parte de la empresa en febrero del 2019. (Se les quitó el convenio vigente y se les aplicó el sectorial, evitando así la obligación de tener que negociar un convenio con el Comité de empresa y privándoles de tener un convenio propio como durante 40 años se ha tenido).
– La no aplicación de la ultractividad del último convenio colectivo e implantación unilateral del convenio sectorial en febrero del 2019 (esto sucedió simultáneamente con la ruptura de las negociaciones por parte de la empresa)
– La falta de acuerdo en la negociación de los traslados. (El 19 de agosto “arrancó” el almacén nuevo de Lezama al que se traslada el centro de Bizkaia, previamente situado en Zaratamo).
– La existencia de una injusta doble escala salarial. (El desastroso convenio antiguo, aparte de una bajada del 30% del sueldo a los trabajadores, acordó también que toda persona de nueva contratación no cobraría un complemento que si poseían los trabajadores en activo en ese momento. Provocando una diferencia del 35% del salario base entre trabajadores de la misma categoría y función).
– Acoso a miembros del Comité de empresa. (Tras la celebración de uno de los juicios en que se han visto envueltos con la empresa, a raíz de la declaración como testigo de uno de los miembros de Comité, aseguran que la empresa tomó represalias vía expediente y posteriormente amenazó con recurrir a vías penales).
– Las cláusulas abusivas en los contratos nuevos y renovaciones de estos. (Cláusulas en las que se recoge que esos trabajadores no percibirán plus de traslado y que tendrán obligación de trabajar los domingos y festivos si la empresa así lo considerase necesario).
Arrastre de malas condiciones y empresa en una postura inamovible
Tras la traumática bajada de salario de alrededor de un 30% que sufrieron hace 7 años y la importante merma en muchas condiciones que provocó la implantación del anterior convenio, la plantilla de Novaltia cree que ya es el momento para volver a tener un convenio justo y un salario digno.
Durante 2 años (desde febrero de 2018 que empezaron las negociaciones) afirman haber intentado llegar a un acuerdo con la empresa en el que la desaparición de la doble escala salarial, la no externalización de sus funciones y la reimplantación de un convenio propio fuesen la columna vertebral de sus pretensiones.
La realidad es que nunca recibieron por parte de la empresa una oferta que tratase siquiera alguno de esos 3 puntos.
En varias ocasiones, por parte del representante de la empresa, se les ha comunicado que es inviable llevar a cabo sus propuestas porque ponen en peligro el futuro de la empresa volviendo a costes de personal del pasado.
Sin embargo, las y los trabajadores están convencidos de que eso no es real y tienen datos que lo ponen en manifiesto:
– El coste de personal que les consta que existía en 2012 era de alrededor de 4.600.000€ y en cambio el actual desciende hasta 1.360.000€.
– La salida mediante ERE de 57 trabajadores en los últimos 7 años, supliéndose alrededor de sólo un 50% de esos puestos con unos salarios mucho más bajos, ha provocado esta disminución de costes y a su vez ha logrado una plantilla mucho más productiva.
– En su última propuesta, el máximo coste que le supondría a la empresa en un año completo (2020) sería de unos 190.000€.
Como se puede ver, el coste de personal, por un lado se entiende que está lejos de hacer peligrar la viabilidad económica de la empresa y por supuesto nunca supondría volver a esos costes del pasado que la empresa les recuerda los graves problemas que acarrearon.
Además, la plantilla y el comité han presentado distintas fórmulas en forma y en plazos que amortiguarían el impacto económico para la empresa, como es la equiparación gradual repartida en varios años.
“Se nos ha dicho a todo que NO”, se lamentan. La empresa sostiene que solo se podrá llegar a un acuerdo si se acepta su oferta, la cual se basa en un plus de productividad con unas cláusulas que permiten que lo reduzca o elimine a su antojo. “La empresa no ha negociado ni cedido nada su posición desde que comenzó la huelga”.
Vulneraciones del derecho a huelga
Se denunció el 22 de julio en Inspección de Trabajo todas las irregularidades que los trabajadores entienden que la empresa está cometiendo y que provocan una vulneración en el derecho a huelga de los mismos.
Denuncian que el informe se emitió en marzo del 2020, 8 meses después de denunciar los hechos, permitiendo que día tras día la empresa “haga trampas y vaya sacando el trabajo, minimizando así el impacto de la huelga”. El informe sanciona gravemente la contratación y renovación de trabajadores de ETT que ha realizado la empresa durante la huelga en 2019, el resto del informe es muy laxo y lo deja en manos de la justicia.
Recuerdan que ya hubo otra denuncia en la que Inspección de Trabajo cursó visita de guardia el 15 de agosto del 2019. Tras 2 meses de espera, Inspección concluyó con un expediente ambiguo en el que “se lavó las manos” y donde propuso derivar la denuncia a los juzgamos alegando que no era competencia de ellos decidir.
El Comité de empresa entiende que se está postergando demasiado en el tiempo puesto que “la empresa mediante constantes y variadas vulneraciones no está cumpliendo sus obligaciones legales de respetar el derecho a huelga”.
Estas vulneraciones hasta la fecha, son las que denuncian a continuación:
Esquirolaje interno:
“Los mandos intermedios de Bizkaia están trabajando sábados y festivos cuando nunca lo han hecho y han extendido sus horarios hasta alcanzar una media de 12-13 horas diarias.
Trabajadores de plantilla que han optado por no secundar la huelga están realizando funciones que nunca habían realizado y en horarios distintos a los habituales.Trabajos que no pertenecen ni siquiera al departamento del trabajador (personal de mantenimiento, comerciales y administrativo preparando pedidos en el almacén)
En ambos casos, tanto mandos como trabajadores están supliendo puestos y funciones de trabajadores huelguistas, además de meter horas extra.
Mandos del centro de Zaragoza han estado trabajando en los centros de Zaratamo y sobre todo en el de Lezama, llegando a estar hasta 10 personas hasta 13h al día durante las primeras 3 semanas del arranque del nuevo almacén realizando tareas correspondientes a trabajadores huelguistas”.
Desviación de trabajo a otros centros:
“Desvío de tareas al almacén Zaragoza.
Desde mediados de Agosto ya no sólo se traen muchos pedidos preparados desde el centro de Zaragoza, directamente no se recibe mercancía de los laboratorios en Bizkaia. Los laboratorios envían la mercancía a Zaragoza y en ese centro se recepciona, revisa, organiza, prepara y envía a Bizkaia para que allí sólo tenga que ser guardada en el robot. Es decir, se está desviando a otro centro una de las funciones principales que siempre se ha realizado en Bizkaia, ahorrándose la empresa alrededor de 8 puestos de trabajo a jornada completa”.
Esquirolaje externo:
“Situación de los trabajadores de ETT contratados por Novaltia. Todos ellos están contratados con motivos como exceso de trabajo y acumulación de tareas, cuando la realidad es que desde que empezó la huelga el trabajo se ha reducido mucho.
Los trabajadores de ETT no están realizando ningún pico de trabajo o tarea concreta, están realizando el trabajo rutinario que se ha desempeñado siempre en el almacén, es decir, colocación, reposición y preparación de pedidos.
Todos los trabajadores de ETT han visto su contrato prorrogado, ya que todos terminaban el 31 de Julio o 31 de Agosto.
Esto ha sido sancionado por inspección y no se ha repetido por parte de la empresa. La estrategia que utilizan en 2020 es sustituir los periodos de vacaciones de los huelguistas por trabajadores de ETT, algo que también hemos denunciado en Junio del 2020 y aún estamos a la espera”.
Medidas de la plantilla huelguista
– Se movilizan frente a la empresa todo el día desde el 22 de julio del 2019.
– Realizan visitas informativas a más de 100 farmacias durante toda la huelga.
– La plantilla ha hecho y seguirá haciendo concentraciones enfrente a farmacias socias de referencia de la cooperativa.
– Todos los viernes se concentran a las 12:00 en Abando (Bilbao).
– Intentan dar máxima difusión a sus acciones mediante las redes sociales.
– Participan en manifestaciones y ponen carteles para hacer eco de su situación.
– Han contactado con farmacias de la junta para hacerles saber su punto de vista de la situación, vía mail y en persona.
Situación actual
Llevan más de 500 días de huelga y parece que va para récord, un triste récord.
Están muy decepcionados con el sistema judicial y las instituciones que deberían servir para impartir justicia y defender los derechos del trabajador.
Aseguran que “exceptuando el informe muy pobre de inspección de trabajo de marzo del 2020, ningún estamento ha sancionado ni abortado la estrategia sistemática y flagrante de vulneración del derecho a la huelga llevada a cabo por la empresa”.
Inspección tardó 8 meses en elaborar un informe y ahora lleva desde Junio con múltiples denuncias sobre la mesa sin pronunciarse (denuncias sobre trabajadores de ETT que cubren los periodos de vacaciones de huelguistas, «algo inaudito»).
En los juzgados ha habido 2 sentencias al respecto y “en ninguna han querido entrar al fondo”, se lamentan.
Detallan que la primera trataba 3 hechos puntuales de un día concreto y el juzgado con un análisis “bastante vago” no les dio la razón. Y la segunda fue una amplísima demanda con más de 10 hechos muy graves (y que solo 2 tenían que ver con el primer juicio) y que abarcaban un año de múltiples y variadas “actividades ilícitas” por parte de la empresa en la que el juez dictaminó que ya eran causas juzgadas en el primer juicio. “Es una vergüenza. Ambas sentencias están recurridas”, afirman.
Última iniciativa
Se ha decidido solicitar una reunión con la empresa y los miembros del País Vasco del Consejo Rector de Novaltia a través del CRL. Esa reunión será el día 27 a las 9:00 de la mañana.
Para que previo a esa reunión se puedan concienciar los miembros del consejo rector (farmacéuticos socios de la cooperativa Novaltia) de la importancia de su papel en esta situación, se han preparado concentraciones delante de sus farmacias durante las próximas 2 semanas. Como por ejemplo la manifestación que realizarán el próximo 22 de enero a las 10:00 horas desde la Subdelegación del Gobierno Vasco en Gran Vía 85 de Bilbao.