Coincidiendo con el inicio de la campaña electoral, la Coordinadora de Grupos de Bilbao la Vieja, San Francisco y Zabala, ha realizado una marcha fúnebre en la que las personas asistentes iban vestidas de riguroso luto, portando ataúdes con los nombres de los barrios, acompañadas durante todo el trayecto hasta el Ayuntamiento por música fúnebre y llevando en sus manos esquelas con las que quieren denunciar, una vez más, la “muerte” de estos barrios, debido a la situación de deterioro, pobreza y abandono institucional por parte del Ayuntamiento y la Diputación Foral de Bizkaia.
NOTA DE PRENSA
La última legislatura municipal ha sido, en ese sentido, una nueva oportunidad pérdida para abordar en profundidad las problemáticas que soportan estos barrios y, lejos de aminorarse, éstas han crecido.
Así aumenta el desempleo, la exclusión social, el recorte en recursos y derechos sociales, el abandono de los servicios públicos, el desamparo de las personas mayores, el racismo institucional y policial, la falta de equipamientos comunitarios, la violencia contra las mujeres, la falta de alternativas educativas para la infancia y la juventud, etc.
Por todo ello, la Coordinadora de Grupos quiere también entrar en campaña electoral, para que la realidad de nuestros barrios y las alternativas a esta situación se coloquen en el centro del debate social y político. Hacemos, así, un llamamiento a que todos los partidos políticos presenten su programa para mejorar la vida de nuestros barrios y de su vecindario. Sólo merecerá nuestro voto quien se comprometa a fondo con una propuesta de rehabilitación integral que aborde las problemáticas mencionadas. Sólo merecerá nuestro voto quien defienda los derechos sociales y civiles de las personas que habitan estos barrios y quienes ofrezcan medidas y recursos suficientes y eficaces contra la pobreza y la exclusión social.
Es por ello por lo que, para la Coordinadora de Grupos, la campaña electoral no es un espacio festivo, todo lo contrario, es un tiempo para denunciar que nuestros barrios se mueren ante la inacción del Ayuntamiento y Diputación Foral de Bizkaia. Un tiempo para reclamar que ya no nos queda más tiempo para aguantar el abandono institucional, la negación de la participación ciudadana y los recortes en servicios, recursos y presupuestos orientados a la mejora de nuestros barrios.