Por: Laura Fontalba
La Plataforma Contra la Exclusión social y por los derechos sociales, Berri Otxoak, se ha concentrado ante la sede del Gobierno Vasco contra el gasto militar y el tren de alta velocidad (TAV), que les dejan, literalmente, en pañales. Han denunciado que los presupuestos del 2022 “suponen recortes sociales mientras, al mismo tiempo, se despilfarran cientos de millones de euros en obras faraónicas y gasto militar”.
Personas contrarias al TAV, antimilitaristas y defensoras de los derechos sociales han manifestado que, en un momento en el que la CAPV cuenta con 219.000 personas en riesgo de pobreza, los presupuestos de 2022 se alejan del contexto de crisis económica socio-sanitaria que estamos atravesando, pues no contemplan medidas para garantizar una sanidad y educación universales y de calidad, y acabar con la pobreza social.
El aumento de la pobreza infantil, los recortes a los pensionistas, la bajada del RGI, los recortes en las Ayudas de Emergencia Social o las ayudas al alquiler son medidas que afectan a numerosas familias. Tal y como han denunciado: “mientras se recortan las partidas destinas al gasto social, se destinan al conjunto de las obras del tren de alta velocidad 388’4, y otros 48’2 para el ramal guipuzcoano; o 100 millones en subvenciones a la industria militar vasca”.
Asimismo, los presupuestos del Gobierno español en gasto militar alcanzarán los 22.796 millones. «A sumar que este pasado martes 14 de diciembre el Consejo de Ministros dio luz verde a la adquisición de 20 aviones de combate Eurofighter, por 2.000 millones de euros. Despilfarro al que debemos añadir la aprobación, en el mes de junio, el destinar 3.000 millones para diferentes programas de armamento como el Sistema Aéreo de Combate (FSAC)», han destacado.
La plataforma ha denunciado que los presupuestos no compensan necesidades sociales, sino que suponen un «derroche». Han denunciado: «Necesitamos más escuelas, viviendas públicas, servicios sociales, hospitales o más prestaciones para las familias que sufren los actuales procesos de precariedad y pobreza en el contexto del pandemia del coronavirus”.
