Este lunes 19 de noviembre, coincidiendo con la conmemoración del Día Mundial para la Prevención del Abuso y el Maltrato Infantil, varios centenares de personas han participado en una concentración realizada en la plaza del Teatro Arriaga en Bilbao, organizada por las asociaciones GARAITZA y ACASI (Asociación Contra los Abusos Sexuales en la Infancia), con el objetivo de dar visibilizar a la lucha contra este tipo de abusos y el sufrimiento que ocasiona a afectados y sus familias.
La concentración que en un primer momento fue silenciosa con algunas de las personas asistentes tapadas las bocas con un pañuelo negro para dar simbolismo al silencio que envuelven los abusos en la infancia. Luego, se ha leído un comunicado en el que se ha denunciado que el abuso y la violencia contra menores «no es violencia de género, porque afecta a niños y niñas». Ya que según sus datos aportados por la organización, el 23% de las niñas y el 15% de los niños del estado español han padecido algún tipo de abuso sexual antes de alcanzar la mayoría de edad, y a día de hoy sigue siendo un problema oculto, por la dificultad de denunciar.
Señalan así mismo que ésta es la peor forma de maltrato porque el dolor que producen y las secuelas graves que generan, perduran y no prescriben con los años.
Las personas que cometen abuso sexual infantil suelen ser hombres aparentemente normales, integrados socialmente, que desarrollan a menudo habilidades interpersonales importantes y mantienen una vida sexual normal. Se estima que alrededor del 13% de los abusos son cometidos por mujeres. Las estadísticas mundiales revelan que 6 de cada 10 víctimas guardan silencio al respecto.
Es por ello que han querido resaltar que a pesar de que los abusos sexuales sigan ocurriendo a nuestro alrededor, muchas veces sin que nos demos cuenta porque son “invisibles y silenciosos”, animan a todas las personas a que denuncien cualquier tipo de caso. “Ya no me callan”.