Tras la confirmación esta tarde de que el cuerpo rescatado en el mar a 1000 metros de profundidad es el de Olivia, una de las niñas desaparecidas en Tenerife y tras la confesión ayer de un hombre que asesinó a su expareja, Rocío Caíz, una menor de 17 años en el municipio sevillano de Martín de la Jara, la asociación Bizitu junto con la Federación del Consejo Nacional de Mujeres y Menores Víctimas de la Violencia de Género han replicado la convocatoria a nivel estatal de varias ciudades reuniendo a cientos de personas ante el Ayuntamiento de Bilbao para manifestar su repulsa más absoluta por el asesinato de dos niñas a manos de “un ser que no merece que le llamemos padre”. Allí han leído el siguiente comunicado:
Tomás Gimeno es un ser que se ha valido de la violencia vicaria, usando a sus hijas como objetos para hacer el daño más grande y más profundo que se le puede hacer a una madre. Quitarle a sus hijas.
Y este no es un caso aislado, recordemos a Bretón, por ejemplo, que asesinó a sus hijos única y exclusivamente por destrozar la vida de su ex mujer. Ricardo Carrascosa, asesino de sus hijas Nerea y Martina. David Oubel, asesinó a sus hijas de 9 y 4 años. O más cercano, el caso de Iñaki Bilbao, bizkaino, que asesinó a sus hijas Amets y Sara de 9 y 7 años.
Pero la violencia vicaria, sin ser llevada al asesinato, la están usando los maltratadores a diario sin que la justicia haga nada por ponerle remedio ni evitarlo.
Cuando los jueces le dan visitas, pernoctas, fines de semana y vacaciones a los maltratadores, les están poniendo a nuestras criaturas en bandeja para poder continuar con el maltrato que ya ejercían contra ellas en casa. Con una diferencia: que en nuestra casa, nosotras nos interponíamos entre el maltratador y nuestros hijos e hijas para parar los golpes. Y cuando se los llevan, están completamente a solas con él.
Los maltratan, abusan, hablan constantemente mal de nosotras y de nuestras familias, los encierran, les dicen que no los queremos… hacen todo lo posible para martirizar a nuestras criaturas porque saben que cuando nos lo cuentan, nos causan el mayor dolor que se le puede causar a una madre.
Y lo peor, es que esto ocurre con el total conocimiento de las autoridades competentes, que son quienes le dan los regímenes de visitas a maltratadores condenados, cuando la ley dice que eso no puede ser así. Los que aceptan el SAP como acusación contra las madres que solo quieren proteger a sus criaturas. Los que anteponen los derechos del pater familias, al bienestar superior del menor. Los que nos califican de locas, alienadoras, obsesas, y mil cosas más. Los que defienden a los maltratadores y nos obligan a entregarles a nuestras criaturas para que después pase esto…
Y cuando pasa algo como esto, o abusos, o maltratos… ¿QUIEN SE HACE RESPONSABLE DE LAS MUERTES, DE LOS DAÑOS PERMANENTES QUE SE LES CAUSA A ESOS MENORES?
¿Quién nos devuelve a nuestros hijos e hijas? ¿Quién les devuelve su infancia y su inocencia? Nadie. Nadie paga por la responsabilidad de arruinar la vida de nuestros hijos, hijas y la nuestra propia.
Tampoco nos olvidamos de la menor de 17 años, Rocío Caíz madre de un bebé de 4 meses, descuartizada por su ex pareja, de 23, ayer en Sevilla. Ni de que Juana Rivas, madre protectora de sus hijos, ha entrado hoy en la cárcel.
Hoy queremos gritar muy alto y fuerte BASTA YA¡¡¡
BASTA DE VIOLENCIA CONTRA MUJERES Y CRIATURAS.
BASTA DE EVADIR RESPONSABILIDADES.
QUEREMOS CONDENAS DURAS, EJEMPLARES, EJEMPLARIZANTES, Y EJEMPLARIZADORAS,
LOS DERECHOS PARA LAS VÍCTIMAS, NO PARA LOS MALTRATADORES¡¡¡¡
EDUCACIÓN EN VALORES Y NO VIOLENCIA PARA TERMINAR CON ESTE TERRIBLE LACRA QUE NOS ESTA ANIQUILANDO!!!