ELA, LAB, ESK, Steilas, Etxalde e Hiru apoyamos el referéndum que se celebrará en Catalunya el 1 de octubre, y nos comprometemos a aceptar su resultado, ya que lo que está en juego es la democracia y el derecho de autodeterminación. Por todo ello, queremos dar un paso adelante desde la solidaridad y la alianza de clase, adquiriendo el compromiso de ser parte activa en el proceso catalán.
En primer lugar, estamos convencidos de que la ciudadanía de Catalunya solo podrá ejercer su derecho a voto el 1 de octubre gracias a la movilización y la activación popular. En segundo lugar, entendemos que el camino emprendido en Catalunya puede abrir una puerta para mejorar las condiciones de vida de la clase trabajadora del resto de pueblos y naciones del Estado, y para conseguir una sociedad más democrática y justa.
Además de ser un ejercicio democrático basado en la legitimidad de las instituciones de Catalunya, la mayoría de la sociedad catalana -ya esté a favor o en contra de la independencia- quiere ser consultada sobre esta cuestión. Así las cosas, denunciamos firmemente la agresión antidemocrática que el Estado español está llevando a cabo contra la Generalitat, las alcaldías, los medios de comunicación y, en general, contra el pueblo de Catalunya. El PP ha impuesto un estado de excepción más cercano a la época franquista que a un sistema democrático, con el apoyo del PSOE y Ciudadanos.
Por ello, lamentamos dos posiciones: por un lado, la incoherencia de aquellos que, aún estando formalmente a favor de la autodeterminación, responsabilizan al proceso democrático de la falta de garantías que provoca el Estado. Y por otro lado, nos parece inaceptable la falta de solidaridad del Gobierno Vasco con el pueblo de Catalunya. Los acuerdos con el Gobierno de Rajoy refuerzan al PP y debilitan a las instituciones democráticas de Catalunya.
Además de antisociales, los acuerdos con el PP limitan el autogobierno. La sociedad vasca necesita un contrapeso eficaz de modo que la propaganda oficial no tenga vía libre para proclamar, al mismo tiempo, una supuesta solidaridad con Cataluña mientras defiende los acuerdos con el PP. Por otra parte, exigimos una posición más firme al Gobierno de Navarra, a la vista de la dura represión contra un proceso democrático, ya que nadie puede mirar para otro lado en una situación como la actual.
Por tanto, las organizaciones firmantes nos comprometemos a ser parte activa en la defensa del referéndum, de manera que la ciudadanía de Catalunya pueda ir a votar el 1 de octubre, libre y democráticamente.
