Desde el Comité de Empresa formado por los sindicatos ELA, LAB y CCOO, aseguran que es prioritario que la empresa se siente a solucionar este conflicto, ya que la ciudadanía de Bilbao está pagando su falta de capacidad y diálogo. Así mismo han señalado la posición del Ayuntamiento de Bilbao, a quien califican de “desaparecido y situándose de perfil” ante este conflicto.
Por otra parte, los trabajadores hacen especial hincapié en el problema de subcontratar trabajos de mantenimiento para “tapar nuestro derecho a huelga, a personal no cualificado para dichas tareas de mantenimiento a E.MARTIN”.
Algo que han querido dejar claro son las dudas y suspicacias generadas sobre cualquier acto de sabotaje que puedan verter sobre su trabajo, ya que aseguran son personas “humildes y sobre todo honradas”. Y por consiguiente, este tipo de actos no forman parte de sus valores y compromiso con los ciudadanos.
Por ello la plantilla se desvincula de cualquier acusación de sabotaje que pueda manchar su honor con lo sucedido hace poco en uno de los cuadros eléctricos de la calle El Cano afectando a varias calles y zonas colindantes. Afirman que no es la primera vez que sucede.
“La ciudadanía no tiene porqué pagar su falta de responsabilidad”.
La plantilla de la UTE BILBOKO ARGIAK exige responsabilidad tanto a la empresa como al Ayuntamiento, ya que tienen bien claro la legitimidad de sus reivindicaciones y saben que sin negociación este conflicto corre riesgo de enquistarse, con el consiguiente daño a la ciudadanía.
Los trabajadores quieren dejar bien claro que no van a ceder y que van a seguir luchando hasta alcanzar sus objetivos colectivos.
En este sentido, han hecho una especial mención los diferentes grupos políticos, Elkarrekin Podemos y EH Bildu quienes les han tendido la mano desde el primer día, especialmente a Xabi y Asier. “Vosotros os habéis ganado a pulso ser parte de nuestro equipo”.
Como representación legal de los trabajadores de la UTE BILBOKO ARGIAK y habiendo consensuado con todos ellos las circunstancias que en este momento atraviesan, han decido suspender el servicio durante 21 días de huelga. Dichas huelgas empezarán el día 4 de mayo y terminará el 25 de dicho mes. Si no se llega a una solución satisfactoria por ambas partes consensuarían con los trabajadores nuevas acciones y nuevos calendarios de movilizaciones.
Para terminar, envían un mensaje de ánimo a todos los compañeros amigos y familiares que tan de cerca están viviendo este agónico conflicto. “Deciros que sin vosotros sería imposible llegar hasta donde hemos llegado y que por supuesto no nos rendimos seguiremos luchando por nuestros puestos de trabajo, por nuestras familias y sobre todo por dar un servicio a la altura de lo que Bilbao se merece”.
