Por Laura Fontalba
Trabajadoras de Ayuda a Domicilio de Bizkaia, sin pertenecer a ningún sindicato ni siglas, se han concentrado ante las sedes de CCOO y UGT, en Bilbao, para dar una respuesta frente a la nota de prensa publicada ayer en nombre de estos sindicatos, en la que celebraban la firma del convenio del SAD de Bizkaia.
Las trabajadoras del SAD han salido a las calles de Bilbao para denunciar que la información ofrecida por CCOO-UGT, quienes aseguraban públicamente que este convenio «hace justicia» y traerá «estabilidad» al sector, es «falsa» y está «manipulada».
Por medio de estas concentraciones, han manifestado su descontento ante los recientes informes, pues, según han explicado, la realidad es que el aumento del 17’5% se realizará lentamente a lo largo de los próximos 5 años (un 2’5% en 2023, 3% en 2024, 3’5% en 2025, 3’5% en 2026 y 5% en 2027). Una cifra que sólo se aumentará si la suma de los IPCs a fecha de 31 de enero de 2028 es mayor que dicho 17’5%, en cuyo caso la diferencia —con un tope máximo del 2’5%— se aplicará al salario base y antigüedad vigentes, y se actualizará a partir de enero del 2028.
Ante esta situación, las trabajadoras han denunciado que, hasta el momento, la pérdida de su poder adquisitivo ya alcanzaba un 20%, es decir, más que lo que este convenio les promete en los próximos 5 años. Asimismo, han explicado que el IPC acumulado en los años anteriores, aplicado a un salario de 1.608 euros brutos, conlleva una subida salarial mensual de 336’07 euros, una cifra muy lejana a la que establece el nuevo convenio, cuyo aumento de 2’5% este 2023 sólo supone una subida salarial anual de 603’03 euros —un total de 4.500 euros de aquí a 2027—.
Las trabajadoras tienen claro que «no dejarán que esto ocurra» y, a pesar de lo acordado, continuarán luchando por unas condiciones y un salario digno. «Con nuestro pan no se juega», han asegurado.
