La amenaza inminente de lluvia, no ha detenido a cientos de personas jubiladas, viudas, separadas y pensionistas, quienes este lunes 12 de noviembre se han reunido en las escaleras del Ayuntamiento de Bilbao, y ya van 10 meses, desde que empezaron a organizarse y salir a las calles y plazas de toda Euskal Herria y el Estado Español para luchar por no perder unos derechos conseguidos a base de sacrificio y trabajo durante toda su vida.
Mientras tanto, el Gobierno asegura a través de su ministra de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social, Magdalena Valerio, que tendrán que sacar alrededor de 3.000 millones de euros del Fondo de Reserva de la Seguridad Social, o mejor conocido como la “hucha de las pensiones”, para pagar la extra de Navidad.
Durante la concentración se ha hecho hincapié en la disponibilidad de recursos económicos para tomar las medidas necesarias que aseguren un Sistema Público de Pensiones, pero recuerdan que se trata de un problema de falta de voluntad política el no aplicarlas ni llevarlas a cabo.
Por ello, siguen animando a no dejar de ocupar las calles hasta que no se logren cumplir todas y cada una de sus reivindicaciones:
– Sistema Público de pensiones, que garantice unas pensiones públicas y dignas.
– Subida del IPC a todas las pensiones garantizada y permanentemente.
– Establecimiento de una pensión mínima de 1080 €.
– Derogación de las reformas de las pensiones vigentes.
– Derogación definitiva del factor de sostenibilidad.
– No a la penalización de las jubilaciones anticipadas.
– Rechazo a los intentos de sustituir las Pensiones Públicas por EPSV y rechazo a los beneficios fiscales.
Y para seguir haciendo presión, volverán a tomar las calles el cada vez más cercano 15 de diciembre, en el que colectivos sociales, feministas, sindicales, estudiantiles y agrupaciones políticas están llamadas a apoyar esta importante cita.
Ya que denuncian la falta de presencia de autoridades institucionales bilbaínas durante las concentraciones que vienen realizando casi durante un año, como invitación para poder “conocerles” y de incluirles en la lista de “a quienes no votar” en las próximas elecciones de mayo.
En el transcurso de las intervenciones se ha vuelto a recordar la movilización que realizarán los estudiantes este próximo 14 de noviembre en Bilbao, y la necesidad de apoyarlos porque se trata de una lucha que repercutirá directamente en el futuro de muchas personas jóvenes y del resto de la sociedad.
