El pasado 7 de enero de 2018, un grupo de personas, vinculadas en su mayoría al barrio bilbaíno de Otxarkoaga, protagonizaron la “ocupación” simbólica del colegio Lope de Vega, en el mismo barrio. Es otro entre tantos equipamientos propiedad del Ayuntamiento de Bilbao, vacíos y condenados a la ruina en un barrio históricamente olvidado por las instituciones y que, sin embargo, tiene un movimiento asociativo amplio y diverso demandante de espacios en los que sacar adelante sus propuestas.
Fue una acción simbólica, su objetivo real era el edificio que BBK, la “obra social” de Kutxabank, tiene en la plaza Kepa Enbeita, antigua guardería y residencia de monjas, abandonado hace ya 4 años. El entusiasmo y la “candidez” de las personas que, ilusionadas, se implicaron en el proyecto de Kaiene, hizo reaccionar a Kutxabank: media docena de vigilantes jurados ocuparon el edificio el día anterior a la entrada. (Artículo de Javi Seco para Naiz)
Hoy, día domingo 27 de mayo de 2018, finalmente se ha llevado a cabo la entrada al edificio abandonado por la Kutxabank, dando por iniciado una serie de actividades como espacio infantil para juegos, charlas, presentaciones de proyectos e iniciativas como Bizi nahi, Karmela, Lokomotorak y la misma Kaiene. Para al medio día realizar una comida y actuaciones musicales.
¿Qué es KAIENE?
Kaiene es un proyecto abierto conformado por personas de Otxarkoaga y Bilbao a título individual que provienen de movimientos sociales y políticos. Kaiene nace de la confluencia y complementariedad de tres iniciativas:
1. Espacio comunitario y autogestionado para el encuentro del barrio.
Espacios abiertos para todas las vecinas que requieran del centro como sala, txoko para celebraciones, juegos infantiles etc. Y actividades culturales y servicios que fomenten el pensamiento crítico, las relaciones horizontales y el activismo social (nevera solidaria, banco de alimentos, oficina de la Rgi…)
2. Ateneo para el debate trasversal de las ideas, del activismo y lugar de encuentro para las organizaciones sociales.
3. Casa de acogida –harrera etxea-, centro de información-asesoramiento para las personas refugiadas y migrantes que transitan por Bilbao y huyen de conflictos políticos, miseria y guerras. Este espacio será una casa común para las personas y organizaciones que trabajan en el ámbito de las personas migrantes y refugiadas.
*Cada espacio tiene su propia dinámica aunándose en la asamblea.
¿Por qué?
Dos son las principales razones que fundamentan el porqué de este proyecto. A día de hoy creemos que en el barrio hace falta un espacio comunitario gestionado directamente por las vecinas. Tenemos unas necesidades que no son cubiertas por la normativa de horarios y rigidez en los usos que vienen proponiendo las instituciones en los espacios públicos. Este espacio debe complementar los servicios públicos que ya existen a día de hoy en el barrio, no sustituirlos y además ser un espacio de encuentro entre los proyectos que ya se están dando en el barrio. Por otro lado, el problema de las personas refugiadas es un drama que al que no se le está dando respuesta. Este proyecto pretende mostrar que la solidaridad desde abajo es posible, desde la sociedad civil, superando el inmovilismo institucional.
¿Cómo?
De forma horizontal, autogestionada y fomentando los valores que promueven los movimientos sociales de Bilbao tales como el feminismo, el ecologismo, el internacionalismo, la soberanía alimenticia, la no discriminación de la condición sexual, de raza o de poder adquisitivo, el laicismo, la democracia de base y a favor de una sociedad más justa e igualitaria.
MANIFIESTO
Hoy abrimos Kaiene, Otxarkoagatik mundura!
Kaiene nace con el objetivo de ser un lugar de encuentro en el que poder compartir ideas y proyectos que aporten al barrio. Lugar en el que se atiendan las necesidades del barrio y las necesidades que nos rodean. Un lugar en el que construir desde la solidaridad y la lucha contra las injusticias. Kaiene tiene como objetivo ser reflejo de lo que es Otxarkoaga, con una máxima: si vosotras no lo hacéis lo haremos nosotras.
Otxarkoaga tiene en sus genes la acogida, solidaridad, la autogestión y la lucha. Es un barrio en el que no olvidamos nuestros orígenes y nos sentimos orgullosos de ellos. Un barrio resiliente que ha salido fortalecido de los muchos y duros golpes que ha sufrido. Somos un barrio creado en su mayoría por personas migrantes, trabajadoras y que mediante la lucha vecinal y la autogestión han ido dando respuesta a las enormes necesidades que ha tenido y tiene. Si bien es cierto que esta lucha vecinal ha conseguido grandes avances en cuanto a habitabilidad, accesibilidad y equipamientos todavía queda mucho trabajo por hacer. Kaiene quiere ser una herramienta más al servicio del barrio, un espacio en el que desde la horizontalidad y la autogestión el barrio construya alternativas. Un lugar donde se puedan reunir todos aquellos proyectos que ya están en marcha en el barrio y en el que puedan surgir nuevos.
Desde Otxarkoaga al mundo, la solidaridad y la lucha del barrio no se queda única y exclusivamente en los límites del mismo, el barrio es sensible a las situaciones de injusticia que se dan a su alrededor y no se queda mirando. Mientras otros construyen muros en puertos nosotras construimos puertos de encuentro y acogida. Mientras la Bilbao institucional de los fastuosos premios y grandes discursos se declara ciudad de acogida de personas refugiada el inmovilismo es total, por lo que nosotras declaramos Otxarkoaga barrio acogiendo. Vosotras no lo hacéis lo hacemos nosotras. No nos vamos a quedar impasibles ante la gravísima situación de desamparo que están sufriendo las personas que llegan a nuestra tierra huyendo de situaciones inhumanas. Y es que como se hace camino al andar, vamos a dotar Kaiene de 15 plazas de acogida para personas refugiadas, 15 plazas en las que poder vivir de manera digna.
Vamos a recuperar uno de los espacios en desuso del barrio, lo que fue una de las guarderías del barrio en las que hemos vivido tantos momentos de alegría, juego y aprendizaje, también alguna que otro lloro y rabieta. Donde empezamos a descubrir el mundo vamos a redescubrir el barrio y sus posibilidades.
