Por: Laura Fontalba
Asociaciones de Hostelería de Bizkaia y Gipuzkoa, junto a otras asociaciones del ámbito de la hostelería, han convocado una manifestación este mediodía para exigir un plan que indemnice y salve al sector. En Bilbao, la manifestación ha transcurrido por la Gran Vía, cuyas tiendas, irónicamente, estaban hoy repletas de compradoras y compradores al coincidir con las rebajas del Black Friday, sin respetar los aforos que en el sector hostelero se han visto tan limitados.
Lo tienen muy claro, no quieren ni «limosnas» ni «parches». Las y los hosteleros exigen, en primer lugar, que se modifique el sistema de ERTEs, se complementen las prestaciones a los trabajadores y trabajadoras, y se exonere el pago de su Seguridad Social. En segunda lugar, que se les otorguen indemnizaciones o ayudas a fondo perdido, por todas las pérdidas que les están ocasionando las medidas tomadas frente a la Covid-19 y, finalmente, que al menos en una ocasión y públicamente «se agradezca al sector su sacrificio».
Han denunciado que cuando otros sectores como el siderúrgico, la naval, la agricultura, etc. han estado en momentos de crisis, se les ha ayudado. Así que, preguntan: «¿Por qué ahora no se ayuda a la hostelería?». Critican que en Euskadi parece haber sectores económicos de «primera» y de «segunda» en el momento de establecer apoyos económicos.
«Señor Urkullu, hacer política es solucionar los problemas de la ciudadanía y de los sectores económicos y sociales de este país, y no proferir insultos en sedes parlamentarias», han declarado los manifestantes, que, además, han acusado a las administraciones vascas de «inacción» y «falta de previsión». Han asegurado que el sector de la hostelería cumple con sus obligaciones igual que el resto de sectores sociales y económicos de Euskadi. Han manifestado que la hostelería es una seña identitaria de nuestra tierra por «construir sociedad, acercar a las personas, generar afectos y alegrar plazas, barrios y calles«, si futuramente quieren mantenerse, no se puede permitir este abandono.
Para terminar, también han recordado a las comisiones de fiestas de Bizkaia, que merecen que se les ayude y se fijen protocolos seguros que les permitan volver a realizar actividades culturales o festivas que dan «vida y color» a las ciudades y pueblos.
