Información del evento
Por qué es necesario movilizarse tanto las personas mayores como las personas jóvenes; trabajadoras, estudiantes, paradas, precarias, por un sistema público que garantice pensiones dignas.
Porque el sistema público de Pensiones, está siendo quebrado de forma premeditada y metódica por las reformas del 2011 como las de 2013 y amenaza a las futuras generaciones de pensionistas.
Porque es necesario blindar en la Constitución el modelo de revalorización automática de las pensiones en relación al IPC real.
Porque es necesario conseguir una pensión mínima de 1080 euros y acabar con las PENSIONES DE HAMBRE y en especial la situación de la mujer, con pensiones medias inferiores en un 37% en comparación con la de los hombres.
Porque el sistema público tiene en cuenta una multitud de riesgos como la enfermedad, la invalidez, la seguridad de los conyugues supervivientes, etc,. Por justicia y cohesión social. Esto supone la solidaridad social, frente la desigualdad material, la desigualdad física y la protección de las personas más vulnerables.
Porque constituye una de las principales piezas de la política social y es la partida principal del gasto público en bienestar social y afecta a más de 9 millones de personas.
Porque hay que acabar con la política de derribo del sistema que genera artificialmente el déficit de la Seguridad Social, debido a las multimillonarias bonificaciones que reciben los empresarios, y contra la caída en picado de las cotizaciones por la contratación basura y pésima calidad del empleo, como consecuencia de las reformas laborales.
Porque la capacidad de financiar las pensiones depende de la producción de riqueza y su distribución. El sistema público de pensiones (sistema de reparto) hoy es perfectamente posible. Solo hace falta voluntad política. Si no se llega con las cotizaciones de las personas activas, las pensiones deben financiarse como los demás gastos sociales, es decir con impuestos y a cargo de los presupuestos generales.
Porque la desgravación fiscal a las aportaciones a los Planes Privados de Pensiones (EPSVs), restan ingresos al sistema público, son un estupendo negocio para los banqueros y constituyen un atentado al sistema público, porque pretenden justificar la rebaja de las prestaciones. Y solamente son accesibles para las personas que tienen rentas altas.
Deja tu comentario