Por Edu Zabala Garagartza, miembro de la PLATAFORMA BASO BIZIAK
En octubre de 2022 los montes de Balmaseda se convirtieron en una bola de fuego, el incendio más grave de los últimos 30 años, un desastre que se debió a fuertes vientos cálidos, a la sequía estival y a un tercer elemento del que nunca se habla, el monocultivo de pinos en terrenos de titularidad pública gestionados por la Diputación de Bizkaia.
«De las 500 hectáreas que se quemaron, 426 pertenecen a montes de uso público, en su mayoría monocultivos de especies pirófitas, directamente relacionadas con la magnitud del incendio que permitieron el avance incontrolado de las llamas. Una tormenta perfecta, por tanto. Visto esto, no se pueden resolver los problemas pensando y actuando de la misma manera que cuando los creamos, pero la Diputación de Bizkaia sigue con la misma receta lo cual puede favorecer, en un momento dado, el mismo resultado.
Hablando de soluciones, esta misma semana se ha publicado en la prensa el proyecto público-privado «BASOA BIZI» que, supuestamente, pretende impulsar la reforestación y la sensibilización social.
Vayamos a los datos públicos: ¿quiénes son los impulsores? La Diputación de Bizkaia, el Ayuntamiento de Balmaseda, BBK Live y la Fundación BASOA. Dos instituciones públicas, una privada y otra mixta. Con este proyecto, como explican en la prensa, (Basoa Bizi’ proiektuarekin biziberrituko dute Balmasedan 2022an erretako basoa- NAIZ-2024-02-05/ Balmaseda une fuerzas para repoblar el bosque incendiado hace un año. La promotora del festival BBK Live invertirá 100.000 euros- EL CORREO, 2024-02-06) parece que BASOA BIZI será el salvador de todo el bosque quemado y no es así: de las 426 has quemadas plantará 17 el próximo mes de marzo, es decir el 4%; no es poco pero no es lo que quieren sugerir.
Por otra parte, los datos de la Diputación de Bizkaia sobre las replantaciones de 2023 y 2024 indican que ascienden a 235 Ha (66% coníferas-pino marítimo-, 18,6% frondosas y 15,4% restante sin especificar). Estos datos demuestran que la Diputación quiere continuar con la producción de madera a base de coníferas, renunciando a la conservación de los bosques que gestiona. Creemos que esta decisión es muy grave puesto que las Instituciones Públicas deben ser ejemplares y pioneras en estos tiempos de emergencia climática, al menos en los terrenos de titularidad pública. Deben favorecer la conservación de los bosques, no la producción de madera a través del monocultivo, ya que esto último es claramente contrario a los criterios medioambientales procedentes de Europa en ese sentido.
El principal impulsor del proyecto «BASOA BIZI», esto es, BBK Live, también quiere vendernos bonos de CO2 como si fueran entradas para un concierto musical, cuando todos sabemos que al plantar un terreno con coníferas para producción, las cortas de dicho monocultivo se realizan sobre los 25 o 30 años. La plantación, la tala, los procesos de transporte y transformación no disminuyen el CO2, sino que lo aumentan; sólo los bosques maduros autóctonos destinados a la conservación, aseguran un saldo positivo de CO2.
El bosque no es algo que plantamos para blanquear la contaminación que genera un concierto del BBK Live, con 7 coníferas y 2 hayas, el bosque es biodiversidad, es crear tierra, es proteger el agua, es comida, es una producción irregular, es un espacio para nuestra salud integral y mucho más. Todo esto lo sabe la Diputación de Bizkaia cuando menciona los «servicios ecosistémicos» del bosque, pero una cosa es decirlo y otra, muy distinta, hacerlo.
No estamos a favor de blanquear la contaminación de nadie, ni mucho menos de seguir con el obsoleto modelo del monocultivo entregando, además, dinero y terrenos públicos al sector privado. NOSOTROS APOSTAMOS POR LOS BOSQUES VIVOS ¿Y tú?
