Arranca así una semana de acciones y solidaridad, desde el 1 hasta el 8 de Noviembre, con la que quieren interrumpir, bloquear y ocupar de manera descentralizada los lugares de cooperación internacional y de apoyo al Estado turco.
Cronología de la resistencia:
En otoño de 2014, el ISIS atacó la ciudad de Kobane en el Norte de Siria/Este de Kurdistán, territorio regido bajo un autogobierno democrático. En aquel momento, millones de personas tomaron las calles alrededor del mundo para mostrar su solidaridad con la revolución de las mujeres en Rojava y con el sistema democrático allí establecido. El mundo entero siguió la histórica resistencia de las YPJ, YPG y del pueblo en Kobane, quienes liberaron la ciudad de las manos del ISIS el 26 de Enero a pesar de la aparentemente desesperada situación.
La revolución en Rojava construyó un sistema de autogobierno basado en la democracia, ecología y la liberación de la mujer en la que estas últimas son la vanguardia, la resistencia de Kobane estuvo liderada por mujeres. El 5 de Octubre de 2014, la valiente y atrevida comandante de las YPJ, Arin Mirkan, se sacrificó en la defensa de Kobane, por lo que el avance del ISIS en Monte Mishtenur pudo ser detenido. Su heroica y desinteresada acción fue un punto de cambio en la batalla por Kobane y se convirtió en un símbolo de resistencia.
La ciudad de Kobane empezó a ser conocida mundialmente por la resistencia que las combatientes ofrecieron y se convirtió en el principio del final del ISIS. El Estado turco estuvo dando apoyo al ISIS desde su origen y siempre propagando durante la batalla que Kobane había caído. Pero Kobane luchó, ganó y reconstruyó la ciudad. Kobane está todavía bajo amenaza, ya que lo que el ISIS no pudo lograr en su momento está siendo ahora perseguido por la propia Turquía a través de los grupos de mercenarios jihadistas. Cuatro años más tarde, a principios de 2018, el Estado turco atacó y ocupó la ciudad de Afrin a la fuerza. Para un año después, en octubre de 2019 continuó su invasión con los ataques en Gire Spi y Sere Kaniye.
Desde entonces, los territorios ocupados se convirtieron en el escenario de los grupos armados terroristas y en sus centros de entrenamiento, que aterrorizan a la población. Turquía amenaza con nuevos ataques en el norte y este de Siria, y Kobane está también dentro del objetivo.
El 23 de junio de este año 2020, tres activistas del movimiento de mujeres Kongra Star fueron asesinadas por drones turcos en una aldea de Kobane. Este ataque a activistas por los derechos de las mujeres “es un ataque a la sociedad, al movimiento de mujeres y al sistema democrático de Rojava”. Con este ataque, denuncian que Turquía pretende vengarse por la derrota del ISIS en Kobane. Y ven también la búsqueda de venganza en la campaña contra las políticas del HDP que Turquía está haciendo hoy en día en Bakur- norte de Kurdistán.
El 25 de Septiembre de 2020, más de 20 miembros del HDP fueron arrestadas acusadas de terrorismo y propaganda por llamar a manifestarse en solidaridad con Kobane durante 2014, cuando la ciudad estaba bajo el control del ISIS.
“Pero esto no puede pararnos. Con el espíritu de las compañeras asesinadas fortaleceremos nuestro espíritu de lucha y ofreceremos resistencia como lo hicimos en Kobane. Porque resistencia significa vida. Decimos “¡No a la ocupación y no al genocidio! ¡Defenderemos a las mujeres y la vida!”. Debemos defender Kobane como lo hicimos entonces. Así cómo las compañeras de Kobane derrotaron al ISIS y defendieron la humanidad frente a él, los pueblos del mundo deben defender Kobane y la Revolución de las mujeres en Rojava debe defender al pueblo frente a la invasión”.
Fuente: Newroz Euskal Kurdu Elkartea
